El hotel denota sus años ya es una propiedad envejecida, su recepción es poco agradable y pequeña. Las habitaciones son amplias y cómodas, una cama de la cual no provoca levantarse, lamentablemente el telefono de mi cuarto estaba dañado no pude solicitar limpieza del cuarto, tuve que bajar dos veces a pedir que lo hagan, no lo hicieron así que baje una tercera vez en otro tono y a medias me atendieron. La zona llama la atención uno o dos días, pero esta llena de gente sin hogar y loquitos, nadie se te acerca pero es feo a la vista y no da una sensación de mucho agrado.