El hotel está muy bien localizado, es una chulada arquitectónicamente y está decorado con buen gusto, el personal es sumamente amable. La cama es buena y confortable. El cable en la tele funciona bien. El wifi, regular. El baño tiene pocos detalles para ser un hotel boutique, por ejemplo, no hay un colgador de toalla ni donde poner la toalla para cogerla al salir de la ducha. Lo peor de este hotel es el ruido que genera la música del bar que se encuentra en la azotea, es molesto, si te quedas en este hotel, asegúrate de llevar tapones de oídos.