La ubicación es ideal para visitar mas tiempo el Parque Tikal. Los jardines son hermosos, todo el hotel limpio y el diseño en general, hermoso. El personal muy amable, no hay bulla la comida del restaurante Panela, excelente y precios tambien muy bien para el lugar que es y la calidad de la comida.
Durante la noche y por la madrugada se escuchan los monos aulladores o aves. Todo el hotel es precioso, regresaría a Tikal solo por el hotel y la comida.