Muy lindo departamento, exquisitamente decorado, aprovechando cada cm cuadrado del espacio sin perder comodidad y con una ubicación única: saliendo de un sotopasagio uno ve la magnífica catedral de Milan. Sin dudas, de volver a Milan, este será mi alojamiento. Un agradecimiento particular a todo el staff, incluyendo a Humberto, su dueño.