Mi estadía en Hotel 28 en Cancún fue realmente excelente ⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️. La propiedad es impecable en todo sentido y me hizo sentir muy bien. Además, su ubicación es perfecta: a pocos pasos está el Mercado 28, con infinidad de tiendas de artesanías, y también el Parque de las Palapas, donde hay fiesta, buena comida y ambiente todos los días.
No es un hotel frente al mar, pero eso no es problema, ya que hay muchas playas cercanas a las que se puede llegar en carro y disfrutar de un buen día. Lo que más me gustó es que, si quieres comer, solo sales y encuentras restaurantes con excelente atención, música en vivo y precios accesibles. El hotel es muy agradable, con estacionamiento al frente, lo cual lo hace aún más cómodo.
Sin duda, una experiencia que me encantó y que recomiendo.