Muy lindo hotel, bien ubicado, pero un desastre el mantenimiento. Hacía frío, y no nos dieron el control de la calefacción, porque la manejaban ellos (así nos informaron), pero era porque no andaba, nos cambiaron a 3 habitaciones, con la molestia de hacerlo, y en ninguna andaba, pero nos tuvieron hasta las 23.30 esperando, hasta que dijimos que no hagan nada y dormimos con frío. El desayuno fue bueno, pero trajeron primero lo dulce, a la media hora el queso, luego el fiambre...
Entiendo que no había mucha gente, pero entonces es mejor que digan que no reciben pasajeros y listo.