Este hotel tiene el equilibrio necesario de un espacio rural, tranquilo y relajante, lejos de la confusión y estrés de la ciudad, con la ventaja de encontrarse a pocos kilómetros de la fantástica Vila Nova de Milfontes y sus hermosas playas.
Ideal para familias con niños, ya que dispone de una pequeña granja pedagógica, donde se promueve la proximidad con los animales, para ayuda en su alimentación.
Después de una noche tranquila, nada mejor que un excelente desayuno.