El personal, es increíblemente atento, amable y servicial, pero las condiciones de las instalaciones del hotel son pésimas. Tiene un mal olor, a caño-alcantarilla, que no es posible permanecer en el lugar. Es un olor muy desagradable y no creo sea salubre que un edificio tenga este problema.
Hice mi observación al personal, ellos con su amabilidad intentaron resolver la situación y buscarme otra habitación, pero el olor, no se eliminaría, por ello tuve que cambiarme de hotel.
Debo recalcar que el hotel, estuvo de acuerdo en realizar el reembolso del dinero. Pero esto no es objetivo, ya que se busca un lugar para cumplir un objetivo que es brindar comodidad, tranquilidad y una buena experiencia; lo cual no fue lo cumplido por las instalaciones del hotel.
Deben realizar mejoras y remodelaciones en las instalaciones y garantizar que el visitante no pase una mala experiencia.
