Las opciones de comida en el hotel son limitadas. El bar y Restaurant que ofrece cena( menú no muy variado, no abre todos los días). El personal que trabaja el buffet de desayuno en especial Myrliu, fue excelente. Muy atenta y profesional.
En relación al room service, aún cuando lo solicitas, necesariamente no llega en un tiempo justo y razonable, los zafacones son tan pequeños, que se llenan con casi nada. La situación antes expuesta, podría interpretarse como falta de personal el cual reconozco que fue amable, pero parecía sobrecargado de trabajo para poder cumplir a cabalidad con lo solicitado. El Spa de la piscina no funciona y se puede visualizar en el piso en ciertas áreas del interior de la piscina hongos. Las toallas en esa área tampoco estuvieron disponibles siempre a la hora de utilizar la piscina.
Aunque se entiende que el idioma principal es el inglés se recibe personas de habla hispana. Al llegar al front desk la persona entiendo de apellido Kohl , no hablaba nada de español . Aunque entendí bastante lo que decía en un momento dado , no podía interpretarlo. Esta tuvo que recurrir a otro huésped para que tradujera, lo que yo no lograba entender. La persona se notaba como incómoda y su rostro reflejaba en cierta forma molestia. No fue grosera, pero esta situación hace sentír al huésped también incómodo y en cierta forma inseguro de lo que se está discutiendo. Deben tener una persona como se menciona en algún momento en promoción en el front desk que sea bilingüe.