La atención del personal es muy buena, todos son muy amables. Las albercas son adecuadas para los niños, son dos albercas, una con resbaladilla y tobogán, los niños se la pasan muy bien. El restaurante del hotel tiene un menú muy variado, con precios justos y la comida tiene muy buen sabor. Los meseros son amables y tienes opción de comer afuera, junto a la alberca, puedes pedir la comida mientras estás nadando. La playa está muy cerca, son 2 cuadras caminando. Tiene 3 estacionamientos y acceso por 2 avenidas diferentes. La verdad estuvimos muy a gusto. Lo recomiendo ampliamente para viajar con niños y estar tranquilos.