El anfitrión me cobró un cargo extra por unos “damage” irrelevantes, incluyendo unas sábanas que ya estaban manchadas desde antes de mi llegada. Además, estuvo llamándome con insistencia para cobrarme ese dinero, lo cual me pareció poco profesional. Desde el inicio también tuve problemas para obtener la información del wifi, ya que cuando lo contacté respondió de forma confusa y sin darme los datos correctos. En general, no me gustó el trato ni su nivel de profesionalismo.