El hotel está muy bien y situado junto al río, a unos 20 minutos de la Catedral, con parking (20 h/día), personal amable y servicial , (en especial la Sra. que se encontraba en el Desayuno, morena con coleta y con gafas que fue super atenta y servicial), salvo la Srta de recepcion ( de ahi mi puntuacion) que nos hizo esperar más de 1 hora para darnos la habitacion porque No estaba lista y porque el check in era a las 14 h para que después tuviéramos que llamar a Recepcion para que hicieran la cama del sofá porque No estaba preparada y ademas faltaban toallas. Por otro parte, el desayuno era escaso la mayoria de bandejas estaban vacias y reponian muy tarde. Comentar que la altura de las perchas esta a casi 2 metros