Buen hotel para visitar Dubrovnik, a una media distancia entre el centro histórico(3,50€ en Uber) y la zona de playas y el puerto desde el que puedes visitar gran parte de las islas. La dueña del establecimiento encantadora, nos ayudó en todo y el hotel, aunque pequeño, es cómodo y con una excelente limpieza y comodidad. El único pero es que debías dormir con la ventana cerrada porque el primer piso era algo ruidoso a primera hora por la cercanía del puerto. Por lo demás una buenisima opción.